Juan Garp: Rock brillante como una esfera solar.
“SOL GALÁCTICO AMARILLO” (2016).
Aunque la denominación y el mito de El Dorado se extendieron por toda América en el siglo XVI, es muy cerca de Bogotá (Colombia) donde surge, por primera vez, dicha fascinante ensoñación en 1540.
Algo así pasa con la enigmática y explorable música de JUAN GARP, el cual precisamente nació en la capital comentada y sin embargo, él también vive y viaja montado en los acordes de todo el ámbito latinoamericano.
Juan Garp, psicodelia-rock latinoamericana.
Sus antepasados y compatriotas norteños, el pueblo de los muiscas, varias centurias atrás adoraban al Astro Rey (asociado éste con el Oro precisamente) y ese reflejo, nunca mejor dicho, me pregunto si parece haberse
tele-transportado al título y planteamiento del primer trabajo en solitario de Juan :
“SOL GALÁCTICO AMARILLO” (2016).
Una Perfecta Esfera Rubia alumbrando la carretera solitaria, efectivamente, constituye la excepcional portada de Garp.
Inmerso en su irisado rock and roll, el propio Juan Garp nos conduce al interior de lagunas plenas de extrañeza y profundidad, tanto lírica como musicalmente. Esto sucede, consecuentemente, con las magníficas “Vacío” de gran sugestividad ambiental, psicotrópica, frondosa, precisamente llena de calidad rockera; en una palabra: S-E-N-S-A-C-I-O-N-A-L. Luego está “Anfibio” (muy a lo Yes Album de 1970) y es lo que es este extraordinario instrumentista ya que se adapta perfectamente al agua, a la tierra y al aire musicales.
“Corazón Malévolo” o “Hacer ésto para que nos oigan” completan una serie de 4 canciones de calma y psicodelia sónicas, todas con sabor y aroma tan agradables como el café de la patria del propio Garp y reminiscentes dichas melodías de las más encumbradas etapas de los Mitos de Anglosajonia (Beatles, Led Zep, Pink Floyd); los cuales también sirven como “rockosas” fuentes al intérprete que nos ocupa.
Eso sí, el apodado “poeta eléctrico”, afincado en Madrid, no extravía nunca su marcado y rico propio sello como compositor, por descontado y también ayudó el haberse curtido, durante muchos años, en bandas como Dorian, de 1996 a 1999, (no confundir con la banda española del mismo nombre) y Fatal the band, de 2000 a 2007; entre otras experiencias previas.
Aunque la fornida y “soleada” canción-título (de "thrilleresco" video donde hombres y mujeres (Juan y Anabel) están condenados a entenderse de manera gravitatoria, dentro de la clásica atracción fatal) o también la enérgica “Catwoman bipolar” y la dinámica “Burbuja de acero” (realmente conseguida y absorbente la metáfora expuesta en otro de sus sencillos) tengan más textura de single accesible, las tres siguen conservando los mismos latidos de espiritualidad latina y de fantasía cotidiana por la que pedalea, firmemente, la totalidad de su álbum.
Es éste además un cancionero, en el cual han colaborado los músicos como Vincent Huma, Candy Caramelo, Diego “Twanguero” García, donde sobresalen las diversas guitarras, las cuales parecen transportarte a imantadas neblinas ornamentadas y hacerte visionar regiones embrujadas de otros planetas.
La utopía ligeramente “sci-fi” y la delicadeza de “Ana” o la belleza incalculable de “Bellos viejos tiempos”, brillan como sustanciosas baladas que ofrecen un páramo con abundante vegetación de sentimientos.
Ana había hecho un pacto con el sol,
le nacieron alas.
Ella bailaba en el espejo...
Ana, espacio-tiempo circular...
“Cuerpo de Marfil”, otro de sus elaborados singles, se desliza inspirada por laberintos femíneos moldeados con dicho material ebúrneo.
Aunque como expresé al principio El Dorado y la música de Juan respiran el encanto de toda América, el intérprete de Bogotá parece también sentir cierta debilidad por las leyendas de Argentina como Charly García, Gustavo Cerati o Fito Páez que junto a los Edelmiro Molinari, Luis Alberto Spinetta, Andrés Calamaro, Norberto Napolitano, Alejo Stivel o Ariel Rot (entre otros) conforman el firmamento argento.
Y¿Quien sabe? Quizás es también el sabio y poderoso Helios en el centro de la bandera albiceleste quien también protege a Juan Garp y le guía hacia la mejor música.
Otra de las apuestas de Garp, “Mi silencio que quema”, más directa y cruda en su discurrir de acordes que otras del álbum, precisamente conserva ese tacto particular muy en la atractiva tradición de los comentados líderes del Sonoro Olimpo Plateado.
Sobre Juan Garp surgen varias expectativas y preguntas sobre sus pasos futuros a dar.
¿Se vislumbra en el horizonte un segundo disco suyo más experimental? Ojalá.
En la imagen del principio vemos ¿Un pequeño sol dentro su mente durante la negra noche?
Sin duda, se trata de una idea lumínica sobre componer una nueva canción.
Profesión? sangre? alma? pasión? de J. Garp:
LA INDOMABLE RESPUESTA A TODO ES...ROCK
Parafraseando y conectando con otro grupo argentino de los años 70, Color Humano y una de sus míticas canciones, se puede augurarle y desearle: “Larga vida al Sol Galáctico Amarillo” de Juan Garp.
Web Juan Garp: http://juangarp.com/
Facebook Juan Garp: https://www.facebook.com/juanngarp
Escrito por Txus Iglesias,
autor del libro "Steely Dan, el rock más elegante".
